Hola queridos amigos, ¿Si alguien te preguntara cuál es tu sueño que le contestarías?

Muchas veces cuando alguien nos hace esta pregunta nos quedamos en el aire sin poder contestarla. Puede que en tu caso sea diferente pero te pregunto: ¿podrías contarme tu sueño y convencerme para ayudarte a lograrlo?

La primera vez que me hicieron esa pregunta fue muy interesante para mí, ya que pensaba que sí podía compartir mi sueño pero cuando lo intenté me fue imposible convencer a alguien. Yo no tenía claridad con relación a lo que realmente quería lograr.

Como líderes en nuestra familia, organización, iglesia o compañía tenemos que tener mucha claridad para poder lograr nuestros sueños.

Hay un artista muy famoso que comprendió este concepto. A mitad del siglo XX, Walt Disney sonó con un parque de diversiones que fuera completamente diferente de lo que existía hasta ese momento. El tomó un vuelo con unos inversionistas sobre el terreno que deseaba adquirir. Mientras que él podía ver su sueño realizado, los inversionistas no lo podían ver. Sin embargo él pudo lograr su sueño porque fue capaz de trasferirlo a ellos porque Disney tenía la claridad necesaria.

Su sueño era más grande que él mismo. Hoy en día su sueño todavía está vivo y su visión se transformó. Hoy en día hay parques de diversiones en diferentes partes del mundo porque su sueño atrajo a otros que se identificaron con él también y trabajaron y colaboraron para hacerlo realidad.

Todos nuestros sueños se pueden hacer realidad si tenemos el coraje de perseguirlos.

¿Cómo poder lograr tu sueño con tu equipo, familia o compañía?

Tienes que tener claro que tu sueño es tuyo.

Tu sueño debe ser tuyo no la idea de otra persona. Napoleón Hill dijo: “Tu deseo debe poder consumirte completamente para poder llegar a obtener lo que deseas.” Si tu sueño no es tuyo, te has de descarrilar y desanimar cuando las cosas se pongan difíciles. Pero cuando tu sueño es tuyo no hay nada que te pueda desanimar. Tú has de seguir hasta alcanzarlo. Tu equipo necesita saber que el sueño que tienes para el equipo es tuyo y que tú estás apoyándolo.

Traza un plan para alcanzar tu sueño.

Cuando estés seguro de que ese sueño es tuyo, lo próximo será diseñar un plan. Sin un plan no has de lograr ese sueño. Decir que sabes lo que tienes que hacer sin tenerlo escrito, es como pensar que puedes poner una deuda en un bloque de hielo. Tu plan te ha de ayudar a pensar lo que puedes hacer, cuán rápido puedes lograr lo que necesitas. Tu plan es la herramienta que puedes usar para compartir tu sueño con otros. Es tu mapa para poder llevar a otros juntos hacia la meta de tu sueño.

Comienza a caminar hacia tu sueño.

Al tener tu mapa ya listo, sólo te hace falta una cosita: comenzar a caminar. Este es el paso más difícil. Muchas veces hacemos los otros dos pasos más nunca comenzamos el tercero. Terminamos el mapa, hasta lo ponemos en un marco para mostrarlo a otros pero no empezamos a caminar. El miedo nos invade cuando tenemos que movernos hacia ese sueño que tenemos. Sin embargo querido amigo(a) quiero decirte que este es el paso más importante. No importa cuánto hagas; tienes que comenzar a caminar. No importa la velocidad. Lo que importa es que estés caminando hacia tu sueño para poder lograrlo. Cuando empiezas ese caminar, tú acción te va a guiar y las personas que te han de ayudar han de acercarse cuando tu sueño empiecé a tomar forma.

¿Qué vas hacer con tus sueños? Te vas a quedar sentado(a) o has de caminar hacia él.

Déjame un comentario y comparte este artículo con tu equipo y amistades para que todos juntos podamos lograr los sueños que hay en nosotros y hacer de este nuestro mundo un mejor lugar.

Tus sueños han de ayudarte no solo a ti, sino que han de ayudar a nuestras comunidades, compañías y países.